La Fundación Hestia acoge a cuatro personas del programa de trabajos en beneficio de la comunidad

La Fundación Hestia ha acogido en lo que va de año a cuatro personas del programa de trabajos en en beneficio de la comunidad (TBC) que impulsa el Departamento de Justicia de la Generalidad. Los TBC son medidas sustitutivas de otras penas impuestas por la justicia que se pueden aplicar siempre que haya el consentimiento de la persona penada.

El Código Penal prevé la posibilidad de sustituir algunas penas de prisión por un TBC a fin de evitar los internamientos de corta estancia. La persona penada se compromete a realizar una actividad no retribuida de utilidad pública y / o interés social, de la mano de un trabajador habitual de una institución.

Entre el 70 y el 75 por ciento de las personas con Medidas Penales Alternativas dictaminadas por la Justicia participan en un programa de TBC y fue en 2018 cuando la Fundación Hestia se sumó a este programa que tiene un doble objetivo.

Por un lado, la persona infractora repara simbólicamente el daño ocasionado a la comunidad, se responsabiliza de sus acciones y descubre el sentido y la utilidad de los servicios que tienen una dimensión social para la comunidad.

Por otra, instituciones como la Fundación Hestia tiene la oportunidad de emprender una iniciativa social en la reinserción de penados y dar difusión a la cultura que busca minimizar los estereotipos sobre la delincuencia y el estigma de sus protagonistas.

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